La depresión es un trastorno mental bastante más común de lo que mucha gente cree, y cuando no se trata a tiempo, puede llevar a situaciones extremas a una persona. Según la Organización Mundial de la Salud, aunque hay tratamientos conocidos y eficaces contra los trastornos mentales, más del 75% de las personas afectadas en los países de ingreso bajo y mediano no reciben tratamiento alguno.
Ante esta situación, los especialistas en salud mental y bienestar coinciden en que hay herramientas accesibles y de bajo costo como la meditación, la práctica del yoga y otras actividades que promueven el equilibrio mente-cuerpo y pueden desempeñar un rol fundamental en la prevención y abordaje de la depresión.
Estas prácticas, integradas a programas de salud y educación comunitaria, no solo promueven el bienestar emocional, sino que pueden contribuir de forma significativa a reducir el sufrimiento asociado a este flagelo silencioso.
“Con la ayuda de las técnicas de respiración y meditación, las personas que sufren de insomnio son capaces de recuperar el sueño, muchos experimentan alivio de la depresión, ansiedad, migraña y otros desórdenes psicosomáticos como consecuencia del estrés”, explicó Juan Pablo Anchezar, instructor de El Arte de Vivir en Argentina.
La respiración es una de nuestras principales fuentes de energía, y si se aprende a respirar de manera consciente, se pueden obtener beneficios como:
* Mejorar el sistema nervioso, inmunológico y cardiovascular.
* Reducir el estrés, la depresión, y el trastorno de estrés postraumático.
* Aumentar el bienestar mental y físico.
* Mejora el estado de ánimo.
Por último, el Dr. Hernán Alessandria, médico psiquiatra, es presidente de la organización civil Global Psy y referente hispanoparlante en Psiquiatría Positiva, afirmó: “La meditación es una herramienta mente-cuerpo validada científicamente, que no solo ayuda a reducir síntomas de ansiedad y depresión en adolescentes, sino que también fortalece recursos positivos como la regulación emocional, la atención plena y el sentido de vida. Estudios recientes confirman que intervenciones basadas en la meditación pueden mejorar el bienestar psicológico y disminuir la ideación suicida en esta población”.