Globant, la empresa de tecnología fundada en 2003 en Argentina por Martín Migoya, Guibert Englebienne, Martín Umaran y Néstor Nocetti, enfrentó esta última semana uno de los momentos más difíciles desde su salida a la bolsa. Reconocida por su enfoque en la innovación digital y por haberse convertido en uno de los partners tecnológicos oficiales de la Fórmula 1, Globant atraviesa una fuerte caída en su cotización bursátil debido a una serie de factores que han deteriorado la confianza de los inversores.
La compañía, especializada en soluciones tecnológicas para grandes organizaciones, había anunciado en 2023 su alianza estratégica con la Fórmula 1, con el objetivo de transformar la experiencia digital de los aficionados y los actores clave del campeonato. Entre sus tareas destacadas se encontraba el desarrollo de sistemas de integración IT y productos avanzados para eventos, como soluciones de streaming en tiempo real y sistemas de entrega de contenido utilizados en el muro de boxes. Este rol posicionó a Globant como un socio relevante en el ecosistema tecnológico del automovilismo internacional.
En el primer trimestre de 2025, la empresa presentó resultados financieros por debajo de las expectativas del mercado. Globant reportó ingresos de 611,1 millones de dólares, lo que representó un crecimiento interanual del 7%, pero estuvo por debajo del consenso de analistas que estimaban 625 millones. Además, sus ganancias ajustadas por acción se ubicaron en 1,50 dólares, también por debajo de lo previsto.
En respuesta a estos resultados, Globant ajustó a la baja su guía de ingresos para el año fiscal 2025. La compañía ahora espera ingresos por 2.464 millones de dólares, lo que representa un crecimiento del 2% respecto al año anterior. Esta proyección es significativamente menor a las expectativas previas del mercado, que anticipaban ingresos de aproximadamente 2.636 millones. Para el segundo trimestre de 2025, la firma proyecta ingresos de al menos 612 millones, lo que implicaría un crecimiento interanual del 4,2%, nuevamente por debajo de las previsiones.
Uno de los principales factores detrás de este ajuste es el impacto de los aranceles comerciales impuestos por Estados Unidos, que han afectado a varios de los clientes de Globant. Esta situación ha generado una ralentización en la conversión de oportunidades comerciales, particularmente en el mercado estadounidense, que representa un área estratégica para la empresa. El aumento de la incertidumbre macroeconómica, junto con la posibilidad de una recesión en Estados Unidos desde principios de año, ha llevado a una reducción en el gasto tecnológico por parte de los clientes.
En América Latina, la situación también se ha mostrado desfavorable para Globant. El desempeño en mercados clave como México y Brasil fue inferior al esperado, en parte debido a la inestabilidad política y económica que afecta la toma de decisiones y las inversiones en tecnología.
Otro factor que ha influido en la caída del valor de la acción es el cambio en el comportamiento de los clientes. La tendencia hacia contratos más cortos y menos previsibles ha generado una mayor volatilidad en los ingresos de la empresa, dificultando la planificación financiera y operativa a mediano y largo plazo.
La combinación de estos factores provocó una reacción negativa en los mercados. La acción de Globant en Wall Street registró su peor caída en varios años, reflejando el escepticismo de los inversores ante la capacidad de la empresa para mantener su ritmo de crecimiento en un entorno macroeconómico restrictivo y cambiante.
No obstante, algunos gestores de fondos mantienen una visión optimista sobre el futuro de la compañía. Argumentan que la corrección en el precio de la acción podría haber sido más severa que la desaceleración real del sector, lo cual abre la posibilidad de una recuperación si Globant logra adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones del mercado y capitalizar su rol como proveedor tecnológico clave en sectores estratégicos como el automovilismo profesional.