La demolición del hostel que se derrumbó y causó la muerte de un joven de 34 años en la ciudad de Córdoba comenzó este lunes luego de que la Municipalidad autorizara a una empresa a que ejecute esa función, al tiempo que un auto ya fue retirado.
Se trata del desmoronamiento ocurrido durante la noche del sábado 17 de mayo en el que falleció Ramiro Alaniz Cortes, quien se encontraba en el local “Posto” del barrio Güemes.
La compañía autorizada por el intendente Daniel Passerini es Brasca Demoliciones, tras cumplir con los requisitos establecidos, por lo que inició con las tareas de remoción este lunes y ya retiró un vehículo que había quedado atrapado entre los escombros.
En este sentido, Lucas, el dueño del rodado, manifestó sus sensaciones en diálogo con los medios locales: “La mínima felicidad es por lo menos cortar con la incertidumbre. Todos estamos preocupados por eso”.
La siguiente etapa consiste en llevar a cabo distintos estudios técnicos para empezar con la demolición controlada del revestimiento del muro, que se hará de forma manual y en dos tramos.
El tránsito para vehículos y peatones en la cuadra está prohibido, mientras que los vecinos de los edificios aledaños del hostel María Reina V deberán mudarse para evitar otras tragedias.
Se prevé que la inversión para ejecutar los trabajos será de unos $300 millones, indicaron desde el municipio.
Además del deceso de Alaniz Cortes, siete personas resultaron heridas y hubo diversos daños materiales. El siniestro se desencadenó a causa de fuertes ráfagas de viento que se registraron en esa jornada.
La Fiscalía de Instrucción N°10, a cargo de la fiscal Celeste Blasco, caratuló el caso como estrago doloso agravado, un delito que establece una pena de uno a cinco años de cárcel, de acuerdo al Código Penal, a la vez que aún no hay detenidos.
La funcionaria judicial intenta constatar si hubo implicados en el mantenimiento del inmueble que se desmoronó.