La periodista Julia Mengolini sostuvo rotundamente que no desea ser presidenta y que “Si Cristina Kirchner está viva, tiene que ser ella”, al tiempo que consideró a la corrupción del poder judicial como un elemento fundamental por el que fue ratificada la condena a seis años de detención contra la ex mandataria.
En diálogo con Patricio Barton en el programa “A quién le importa” por Splendid AM990 y tras un fuerte cruce con su par Matiana Brey a quien señaló que “no tiene ni puta idea de política”, Mengolini retomó: “Con Mariana Brey no me amigo ni en pedo ¿Cómo vas a comparar a Cristina con los genocidas? Ella me parece muy canalla”.
A continuación, la conductora sostuvo que se modificó la diferencia social entre los simpatizantes de partidos políticos: “La grieta ya es democracia versus autoritarismo. Tampoco me parece que sea Cristina -Kirchner- o no, sino fuerzas democráticas versus otra cosa”.
A continuación, se refirió al juez Mariano Borinsky: “Te puede gustar Cristina o no, pero el juez va a jugar a la pelota, al pádel y al tenis con Macri. Fue 16 veces a la casa de Macri. Es un montón en cualquier país del mundo”.
Al tiempo, relató que consultó la disyuntiva con la inteligencia artificial de X -ex Twitter-: “Hoy Grock dijo que en cualquier país serio, si uno de los jueces involucrados en la condena tuviera tanto vínculo con el principal contrincante de la acusada, sería causal de nulidad del juicio”.
“No tenés que ser kirchnerista para ver que esto es un problemón. Está muy corrupto el poder judicial argentino, este fallo fue veloz. Hay quienes descreen de una conspiración entre los jueces, pero no, todos tienen relación con Macri y cuando buscás las pruebas, no hay”, analizó.
Asimismo, la comunicadora se mostró optimista: “Veo un estado de alerta, como un nuevo compromiso de dónde (…) Quizás es algo más parecido a una rebelión popular. Esto que pasó, es tan grave que se responde a fondo. No hablo de acciones violentas, sino de la construcción”.
En su caracter de abogada y enfoque político, Bartón le consultó a la periodista si consideraría llegar al máximo puesto en el poder Ejecutivo: “No puedo ser presidenta, tengo los huevos para eso, pero no la inteligencia. Necesitaría mucho respaldo popular. Si Cristina está viva, tiene que ser ella. No quiero ser presidenta”.
No obstante, Mengolini retomó: “La dirigencia, que estaba en cualquiera, se ordenó. Se peleaban entre sí y se tiraban con cualquier cosa. Cada vez estaban más divorciados de la base electoral. El ausentismo en las últimas elecciones fue muy tremendo”.
“Creo que esto va a ir en un in crescendo porque la resistencia peronista, después del golpe del ‘55, se armó desde los núcleos duros, en secreto y a lo largo de los años. Lejos de apagarse, posiblemente, se empiece a organizar algo que vaya creciendo”, concluyó.