Sonia Ester vive a una cuadra del edificio en el que la dos veces presidenta Cristina Fernández de Kirchner pasará su condena a seis años de prisión por la causa Vialidad y protesta contra la permanencia de la militancia kirchnerista que respalda a su líder política.
“Es vivir en un caos. No poder dormir por los cantos, los gritos, no poder pasar para hacer mandados”, denunció en declaraciones a Radio Rivadavia, y sumó: “Es ver como la gente pierde su libertad porque la que tiene que estar presa es ella y los que estamos presos somos nosotros, los vecinos”.
Por su parte, se quejó de la suciedad en las calles del departamento ubicado en San José al 1111, correspondiente al barrio porteño de Constitución, y remarcó que hay olor a parrilla y a pis. Además, pidió que cumpla su pena en una cárcel común.
“No hay respeto a la sociedad porque la que es ladrona es Cristina. La que tiene que estar presa es ella”, insistió, y completó: “Nos hacen querer creer que los que somos delincuentes somos nosotros. No nos dan lugar a vivir en paz, tendría que estar encerrada y no con prisión domiciliaria. Menos ahí.
Por su parte, cuestionó la toma de la Facultad de Ciencias Sociales, ubicada a unos metros de su hogar, y planteó que el barrio está rodeado de “delincuentes que están en libertad” mientras los vecinos están “presos”.
“No es un lugar para que tenga una prisión domiciliaria. No tendría que tener ningún privilegio porque se demostró con muchísimas pruebas que la señora es una corrupta que nos robó a todos y la gente que está ahí, a la gente que vive en el barrio”, aseveró Sonia Ester.
En la misma línea, agregó: “No puede ir presa con todas las comodidades. Si va presa ahí vamos a tener todo el tiempo a militantes gritando, escribiendo las paredes. El barrio es un desastre. Nos cuelgan carteles y banderas”.
“No hay derecho a que vivamos en paz”, subrayó, y sumó: “Bastante nos robó y vivimos soportando a sus militantes que no entienden porque son tan ladrones como ella o no quieren ver la realidad de que la persona vive feliz y contenta, aunque esté presa en su departamento, no le falta nada”.
Por último, remarcó que las personas que permanecen en las inmediaciones del barrio padecen el frío y la lluvia, mientras Cristina Kirchner “desayuna y utiliza el aire acondicionado”. “Estoy indignadísima, estoy enojada. La justicia tiene que hacer más. Si tiene que estar presa que lo esté como cualquier delincuente, perdió todo derecho”, concluyó.