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La muerte silenciosa: una mujer murió por monóxido de carbono ¿Cómo evitar una tragedia?

Una mujer murió al inhalar monóxido de carbono en un edificio en construcción ubicado detrás de un shopping, en la ciudad de Salta.

La víctima, identificada como Sosa, fue hallada por un sereno que había llegado para reemplazar a su compañero.

Peritos de la Policía Científica realizó distintos análisis en el lugar de la tragedia y encontraron una chapa en el piso, que tenía brazas encendidas. Las autoridades creen que el deceso se desencadenó como consecuencia del uso inadecuado de la calefacción.

El sereno, que también aspiró el gas nocivo, fue derivado de emergencia en una ambulancia del Sistema de Atención Médica para Emergencias y Catástrofes (SAMEC) a un hospital cercano.

¿QUÉ SE DEBE TENER EN CUENTA PARA PREVENIR ESTA INTOXICACIÓN?

1. Revisar periódicamente las instalaciones de gas: es clave asegurarse de que estufas, hornallas y calefactores funcionen correctamente. Si la llama se ve amarilla o anaranjada, o si hay manchas de hollín en los artefactos o sus salidas, se debe contactar a un gasista matriculado.

2. Ventilar los ambientes todos los días: aunque la temperatura baje, es esencial permitir la entrada de aire fresco. Abrir puertas y ventanas al menos una vez al día ayuda a renovar el oxígeno y evitar la acumulación de gases tóxicos.

3. No dejar encendidos los artefactos durante el descanso: dormir con la estufa prendida representa un riesgo alto. Si el artefacto no tiene salida al exterior, puede liberar monóxido de carbono mientras las personas duermen, dificultando la detección de síntomas.

4. Instalar detectores de monóxido de carbono: don dispositivos de bajo costo que permiten detectar el gas a tiempo. Se recomienda instalarlos en espacios cerrados donde haya artefactos a combustión y controlar que estén siempre en funcionamiento.

5. Reconocer los síntomas de intoxicación: dolor de cabeza, mareos, náuseas, vómitos, visión borrosa, debilidad o dolor de pecho pueden ser señales de exposición. En casos más graves, pueden presentarse convulsiones o pérdida del conocimiento. Ante cualquier sospecha, es imprescindible acudir de urgencia al centro médico más cercano.