El presidente de YPF, Horacio Marín, rompió el silencio tras el fallo de la jueza estadounidense Loretta Preska en el juicio por la expropiación de la petrolera y aseguró que la decisión judicial “no afecta a la empresa”, sino “a la República Argentina”. “El juicio no compromete nuestras operaciones ni impacta en el precio de la nafta”, subrayó.
“La nafta depende del precio internacional del petróleo, del tipo de cambio, de los biocombustibles y de los impuestos. No tiene nada que ver con la sentencia”, explicó Marín, despejando rumores sobre un posible aumento inmediato en los surtidores. En ese sentido, también adelantó que la compañía continuará con su política de precios diferenciados por horarios, conocida como la “uberización” de las estaciones de servicio: “Ofrecemos descuentos de noche y ya logramos un 25% más de consumo en esa franja”.
En en diálogo con A24, el presidente de YPF defendió la transformación tecnológica que lleva adelante la empresa y detalló que hoy pueden monitorear en tiempo real lo que ocurre “surtidor por surtidor”. Con esta herramienta, buscan mejorar el rendimiento y adaptar precios a la demanda, replicando lógicas del mercado digital.
Marín también se refirió al futuro de Vaca Muerta, al que calificó como “el gran motor energético del país”, y proyectó exportaciones por 30.000 millones de dólares anuales para 2030. “El juicio no afecta este camino. Estamos cerrando el financiamiento del nuevo oleoducto, una obra de 3.000 millones de dólares que es clave para transportar nuestros recursos”, afirmó.
Sobre los recientes cortes de gas que afectaron a algunas regiones del país, el titular de la petrolera estatal explicó que se debieron a un “récord de consumo” combinado con problemas operativos en dos yacimientos que bajaron la producción. “Todos los inviernos pasa. El GNC es un contrato interrumpible y esos son los que primero se reducen”, señaló.
Finalmente, Marín anunció el envío de diez profesionales de YPF por año a las mejores universidades del mundo para especializarse. “Queremos formar una nueva generación técnica, una YPF invisible pero sólida, que quede cuando me vaya”, concluyó.
La compañía estatal atraviesa uno de sus momentos más desafiantes, con un fallo millonario en su contra en el exterior, pero también con la ambición de consolidarse como líder regional en la industria energética. Marín, en tanto, dejó en claro que el plan sigue en marcha y que, al menos para YPF, no hay marcha atrás.