En medio de la creciente tensión entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, lanzó una advertencia clara: el conflicto solo podrá resolverse si la titular del Senado demuestra mayor respaldo político a las decisiones del Ejecutivo. Así lo expresó este domingo al subrayar que “siempre hay posibilidades para un encuentro”, pero que todo depende de los gestos de Villarruel.
“Si se puede modificar esta situación de tensión, depende de que la Vicepresidenta se muestre más solidaria con el rumbo del Gobierno”, sostuvo Francos en declaraciones radiales, en un intento por dejar en claro que la Casa Rosada no piensa ceder terreno sin condiciones. Aunque descartó que exista una crisis institucional, admitió abiertamente que hay una “crisis política” dentro de la cúpula de La Libertad Avanza, con diferencias cada vez más profundas entre las principales autoridades del país.
El detonante más reciente fue la sesión del Senado del 8 de julio, donde Villarruel habilitó el tratamiento de proyectos impulsados por la oposición, entre ellos, el aumento a jubilados y la declaración de la emergencia en discapacidad. Para Milei, fue una “traición”; para Francos, una “defraudación” que generó un quiebre. “En esa sesión, tanto el Presidente como la ministra Bullrich entendían que debía actuarse de otra manera”, dijo el funcionario.
Desde entonces, las críticas hacia Villarruel no cesaron. En respuesta, la vicepresidenta defendió su rol institucional y criticó con dureza la falta de diálogo: “Cuando el presidente decida hablar y comportarse adultamente, podré saber cuáles son sus políticas”, disparó en redes sociales. También defendió su accionar con argumentos sociales: “Un jubilado no puede esperar y una discapacitada, menos. Que ahorre en viajes y en la SIDE y listo”.
Francos reconoció, además, que parte del malestar de Villarruel radica en que no se le permitió coordinar áreas clave como Defensa o Seguridad, espacios que durante la campaña Milei le había prometido y que finalmente fueron ocupados por figuras del PRO como Patricia Bullrich y Luis Petri. “Eso fue en campaña. Luego, las circunstancias políticas cambiaron”, explicó el ministro.