Independiente enfrentará este viernes a Belgrano de Córdoba por los octavos de final de la Copa Argentina y la metrópolis santafesina de Rosario será la sede de un partido donde el “Rojo” se jugará algo más que su estadía en el certamen federal.
El arranque de los de Avellaneda en este semestre viene siendo malo y roza lo penoso, decepcionando a los propios hinchas y a los ajenos que se deshacían en elogios con el equipo en el primer semestre donde fue uno de los protagonistas indiscutidos tanto del Torneo Apertura y de la Copa Sudamericana.
Pareciera ser que el conjunto del entrenador Julio César Vaccari perdió su alma y su espíritu competitivo, pareciera como si ninguno de los jugadores o la gran mayoría no se vacía por la causa y salen a jugar apáticamente con inseguridad y anticipándole al hincha que otra derrota se sumará a este ciclo del director técnico ex Velez.
Podrían responderse todas las incógnitas con la justificación simplista de que “es un equipo nuevo”, basándose en que en la defensa solo está Kevin Lómonaco con respecto al semestre pasado y que la delantera tiene un integrante nuevo que es Walter Mazzantti.
Además, la salida del lateral izquierdo colombiano Álvaro Ángulo caló hondo tanto en el grupo como en el armado del equipo y es algo que todavía no pudo suplir el entrenador, ya que recién en el pasado partido ante Gimnasia La Plata debutó el que será su reemplazante: Facundo Zabala.
El hoy jugador de Pumas UNAM de México era una pieza más que indispensable para Vaccari por su entrega, su rol en el grupo, su potencia y, sin lugar a duda, su impresionante estadística goleadora teniendo en cuenta su posición en la cancha: cinco goles en 25 partidos.
Pero, si bien es cierto que existe esta reconfiguración del once titular con respecto al primer semestre, también es cierto que hay nombres que están atornillados a su lugar a pesar de su más que pobre nivel y ahí la responsabilidad empieza a ser compartida ya que es el entrenador quién debe tomar el toro por las astas y quitar esos apellidos del equipo en caso de que no rindan, sin importar trayectoria o rol en el grupo.
Aparentemente, el entrenador haría modificaciones fuertes en cuanto a nombres e ingresarían el uruguayo Rodrigo Fernández Cedrés y el chileno Pablo Galdames en lugar de Iván Marcone y Luciano Cabral, respectivamente en el mediocampo. Además, Ignacio Pussetto reemplazaría al paraguayo Gabriel Ávalos como centrodelantero.
Si bien el equipo se juega algo más que su estadía en la Copa Argentina, el director técnico sabe bien que también está en la misma situación ya que, una derrota ante el ´Pirata´ en Rosario, pondría en jaque su puesto en Independiente a tan solo cinco partidos de haber iniciado un semestre en el que en Avellaneda apuntaban a campeonar en alguna de las tres competencias.
Para esto, deberá dejar el temor de lado cuando debe ir a buscar la victoria, deberá empezar a tener creatividad en las variantes que ya salen de memoria, deberá transmitirle nuevamente seguridad al equipo y, por sobre todo, tendrá que empezar a arriesgar más ya que cuenta con las herramientas para lastimar a los rivales.
Por ello, el partido ante Belgrano de Córdoba de este viernes en el estadio Gigante de Arroyito será una -sino “la”- prueba para que este plantel y cuerpo técnico demuestre que lo dicho anteriormente son solo suspicacias o visiones erróneas y que lo sucedido en este arranque fue solo un nuevo bache que tuvo el proceso como lo fue en la recta final del Torneo Apertura.
