Con las vacaciones de invierno en pleno auge, muchas rutas hacia los principales destinos turísticos de la Argentina se encuentran cubiertas de nieve. En este contexto, manejar con precación es fundamental para quienes viajan en auto a zonas como Neuquén, Mendoza, Río Negro o Chubut, donde el frío intenso y las condiciones climáticas extremas vuelven más peligrosos los caminos y exigen extremar los cuidados al volante.
Cuando cae mucha nieve es fundamental manejar a baja velocidad y respetar la distancia de frenado, dos factores que ayudan a controlar mejor el auto, debido a que en condiciones húmedas sobre terreno resbaladizo la distancia común de frenado se triplica y se necesita más espacio para detener el vehículo.
Otra recomendación de los especialistas es usar “marchas largas”, esto sifgnifica que el motor funciona a menos revoluciones por minuto, lo que vuelve menos probable que las ruedas patinen. Si un auto llegara a tener una caja de cambios automática con opción de modo manual es fundamental activarlo para tener un mayor control sobre los cambios.
¿CUÁNDO HAY QUE USAR CADENAS PARA LA NIEVE?
Las cadenas no son solo un accesorio útil: en muchos casos, son obligatorias. Según las recomendaciones oficiales, si hay más de 10 centímetros de nieve acumulada sobre la calzada, el uso de cadenas es indispensable. También lo es si hay hielo visible o si las autoridades lo indican mediante controles o carteles viales.
Las cadenas deben colocarse en las ruedas del vehículo que tienen tracción (delanteras si es tracción delantera, traseras si es tracción trasera) y bien ajustadas. Una colocación incorrecta no solo reduce su efectividad, sino que puede dañar la dirección o la suspensión del auto.
La Policía de Neuquén publicó recientemente una guía práctica para instalar las cadenas de forma segura y eficiente. Estos son los pasos esenciales:
* Estacionar en un lugar plano, seguro y alejado del tránsito.
* Encender las balizas y ponerse un chaleco reflectante.
* Extender las cadenas sobre el suelo, centradas sobre la banda de rodadura del neumático.
* Asegurarse de que los ganchos metálicos queden hacia adentro, en contacto con la cubierta.
* Avanzar unos centímetros para que la rueda quede sobre parte de la cadena.
* Conectar los extremos y ajustar los tensores. Si las cadenas no son autotensables, se recomienda revisar el ajuste después de avanzar unos metros.
* Usar guantes y, si es posible, una alfombra para evitar el contacto directo con la nieve o el hielo.
HIELO NEGRO: EL ENEMIGO INVISIBLE
Una de las situaciones más peligrosas al volante en invierno es el “hielo negro”: una delgada y casi invisible capa de hielo que se forma cuando el agua o la humedad se congelan sobre el pavimento. Es difícil de ver y puede hacer que el auto pierda completamente la tracción.
Para detectarlo, se recomienda prestar atención a sectores con sombra prolongada (curvas, zonas arboladas) y observar señales indirectas, como escarcha en el pasto o hielo en la vegetación de las banquinas. Evitar conducir de noche o al amanecer también reduce el riesgo.
10 CONSEJOS CLAVE PARA MANEJAR EN NIEVE O HIELO
1. Revisar el estado general del auto: frenos, batería, luces, calefacción y fluidos.
2. Usar neumáticos en buen estado y cadenas cuando la nieve lo requiera.
3. Disminuir la velocidad y aumentar la distancia de frenado (se triplica en nieve o hielo).
4. Evitar maniobras bruscas: acelerar, frenar y doblar de forma suave.
5. Circular con marchas largas, incluso en caja automática si tiene modo manual.
6. No usar control crucero: puede provocar derrapes en superficies resbaladizas.
7. Encender luces bajas todo el tiempo y faros antiniebla si hay nevada.
8. Seguir las huellas de otros autos cuando la nieve es intensa.
9. Prestar atención a zonas con sombra, más propensas a tener hielo.
10. Evitar circular en moto en caminos nevados. Si es indispensable, hacerlo con máxima precaución, indumentaria térmica y elementos reflectivos.