Una jubilada murió dentro de una residencia geriátrica que estaba clausurada y según la hija pudo haber sido por no recibir la atención médica correspondiente, en la provincia de Córdoba.
Según la información que aportó el portal El Doce, el allanamiento se llevó a cabo en una vivienda que no contaba con la habilitación correspondiente y también se recibieron varias denuncias de ex empleadas por maltratos y golpes a los residentes por parte de los trabajadores del hogar.
Además, una semana antes del desalojo del lugar, la dueña había llamado a la hija de la fallecida para notificarle que se había quebrado la cadera y que debía ser internada en una clínica.
Aunque, al trasladarla, los médicos constataron que la mujer llevaba meses sin la atención médica que precisaba, además de que no se le suministraba la medicación que debía tomar para su cuadro de hipertensión.