La investigación por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) comenzó a arrojar sus primeras conclusiones preliminares, revelando “irregularidades” en el organismo estatal y la sospecha de “posibles sobreprecios y direccionamiento en las contrataciones”. Así lo confirmó a TN el periodista Bruno Yacono, quien indicó que la Justicia está poniendo el foco en los vínculos comerciales entre la ANDIS y la droguería Suizo Argentina.
Tras el levantamiento del secreto de sumario, los investigadores, bajo la órbita del juez federal Sebastián Casanello, están revisando la prueba recolectada y ya tienen “indicios de direccionamiento y de compras por encima del valor de mercado”, según una fuente judicial citada por Yacono. La causa, que involucra a Diego Spagnuolo, extitular de la ANDIS, y a los hermanos Kovalivker, dueños de Suizo Argentina, entra en una fase clave.
LOS CELULARES DE LOS KOVALIVKER Y LA EXPECTATIVA POR UN “ARREPENTIDO”
Uno de los principales desafíos que enfrenta la Justicia es la imposibilidad, por ahora, de acceder al contenido de los celulares de los hermanos Jonathan y Emanuel Kovalivker. El análisis forense de esos dispositivos es considerado “clave” para corroborar si existió un esquema de retorno de dinero a cambio de adjudicaciones con supuestos sobreprecios.
Mientras tanto, Spagnuolo, quien al asumir había declarado un patrimonio de apenas 25 mil dólares y en su domicilio se encontraron 80 mil dólares y 2000 euros en efectivo, sigue sin designar nuevo abogado. Esta situación genera “incertidumbre” sobre sus próximos movimientos, especialmente la posibilidad de que se presente como imputado colaborador y revele información sobre el “sistema de coimas” y sus posibles ramificaciones en el “círculo más estrecho del gobierno de Javier Milei”.
AVANCES EN LA INVESTIGACIÓN: DE LOS BARRIOS PRIVADOS A SUIZO ARGENTINA
Aunque el celular del exnúmero dos de la ANDIS, Daniel Garbellini, “no arrojó nada muy interesante”, la Justicia analiza el registro de ingresos a los barrios privados donde vivían Garbellini y Spagnuolo para detectar posibles visitas de empresarios y funcionarios.
En paralelo, los peritos avanzan con el análisis de la documentación en papel, archivos digitales y correos electrónicos. También se encuentra pendiente el acceso al servidor de Suizo Argentina, un procedimiento técnico de alta complejidad que podría demorar varios días más. La Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) y una auditoría interna en el Gobierno continúan evaluando los contratos, mientras los Kovalivker insisten en la legalidad de sus operaciones.