Tal como indica el dramatismo teatral de una tragedia musical situada en la época del romanticismo, Pepe Cibrián sigue adelante con una denuncia por supuesta estafa y fraude contra su ex socio, Ángel Mahler, que falleció hace cuatro meses, aunque sostiene que aún lo “ama”.
La trama no es tan intensa como la de drácula, pero lo suficiente como para poner en tela de juicio la honestidad financiera del icónico compositor, con Cibrián que sostuvo: “Nunca hablé del tema, no me parecía correcto, pero se hicieron ciertos comentarios”.
Así que “Pepe” decidió retomar sobre sus pasos en el vínculo: “En 1983, Ángel tenía 22 años y yo necesitaba un arreglador para mi primera versión de Calígula. Los que conocí no me gustaban. Una amiga en común me recomendó a Ángel y efectivamente, un día lo conocí y le pedí un arreglo. Esa misma noche, él me dejó el arreglo hecho y me impactó mucho. Así fue siempre”.
“Al año siguiente y durante varios años, fue parte de quienes hicieron la música de mis obras, hasta que sólo seguí con él y, en un punto, nos separamos. Más tarde llegó mi reunión con Tito Lectoure para que me produjera un teatro de 200 o 300 localidades, ahí se me ocurrió llevarle a Drácula En ese momento no estaba ni Ángel, ni nadie en mi cabeza y Tito tampoco tenía idea”, continuó.
Sin embargo, ese vínculo no terminó bien porque actualmente, los herederos de Mahler, ya atravesaron dos allanamientos, secuestros de dispositivos electrónicos e inhibición de ventas de Ángel Mahler en Estados Unidos.
Esta información fue asumida por el mismo Cibrián que explicó: “El estudio Sequeira se está encargando en Buenos Aires, sé que hubo allanamientos, tanto Ángel como a Daniel Macón, socio en el momento”.
“No le deseo la muerte, ni nunca se la deseé como dijeron desde su familia, que dijeron que se murió por mi culpa. Me parece una reacción absurda y delirada que me afecta a mí, pero no al juicio. Nuestra relación sólo la conocemos nosotros, fue como un matrimonio de más de 40 años”, insistió “Pepe”.
“Jamás en la vida le pedí a Ángel un recibo. Pero cuando mi marido recibió, vio en simplezas que era totalmente distinto, en simplezas, el precio que se había pedido, del que se había gastado. A través de una contaduría, pedimos a un socio que me envíe los recibos”, continuó el artista.
“No estaba en buena relación con Ángel. Después de la primera reposición de Drácula el anteaño y el Jorobado de París, nos peleamos fuerte y dije ‘Nunca más, Ángel’. Entonces, no tenía nada que preguntarle. A parte, no dudé que esté en regla porque ¿cómo me va a estafar?”, añadió el director teatral.
“La denuncia fue radicada porque antes mi pedido legal, él me contestó con un telegrama en donde decía ‘No te tengo que rendir nada porque nunca fuimos socios’. Como negó mi relación, hice una denuncia por lo que se presentaron cientos de pruebas y el juez decidió hacer un allanamiento porque se supone que hay motivos suficientes para demostrar que es incorrecto”.
“A los 77 años reclamo lo que es mío. Lo he amado a Ángel y, desde algún lugar, aún lo amo porque no se pueden tirar 42 años de amor”, concluyó Pepe Cibrián.