El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y el expresidente del país, Dmitri Medvédev, subió el tono en las discusiones con líderes europeos, a quienes tildó de “degenerados insignificantes”.
“Los líderes europeos son unos degenerados insignificantes, incapaces de asumir la responsabilidad de ningún asunto serio. Carecen de pensamiento estratégico, y mucho menos de la pasión necesaria para tomar decisiones militares acertadas”, expresó.
En otro capítulo de la polémica entre funcionarios rusos y sus pares de Europa, Medvédev tomó la palabra por su país y sostuvo que quienes mandan en el Viejo Continente no serán capaces de desatar una guerra contra Moscú pese a su retórica belicista.
En su canal de Telegram, Medvédev argumentó que los países europeos “son vulnerables y están desunidos”, por lo que solo “pueden perseguir sus propios intereses intentando sobrevivir en el caos económico actual”.
Por tanto, “simplemente no pueden permitirse una guerra con Rusia”, señaló el exmandatario, citado por el sitio Actualidad RT.
“En su mayoría, son materia inerte y decadente que no está dispuesta a luchar por ningún ideal común, ni siquiera por su propia tierra”, atacó.
El alto funcionario recalcó que un conflicto armado con Europa tampoco conviene a Rusia, cuya prioridad actualmente es desarrollar sus territorios y restaurar las ciudades afectadas durante el conflicto con Ucranian.
“A Rusia, en principio, no le hace falta una guerra con nadie, incluida con la frígida y vieja Europa. No hay nada que ganar allí. La economía europea es débil y dependiente de Estados Unidos, y su cultura se degrada sin gloria”, continuó Medvédev .
Pero también reflexionó: “La posibilidad de un accidente fatal siempre existe. Y la hiperactividad de los idiotas [los líderes europeos] no ha desaparecido. Un conflicto así conlleva un riesgo muy real de escalar hacia una guerra con armas de destrucción masiva”.