En la previa al duelo decisivo ante Racing por la vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores, Flamengo puso policias al rededor de su hotel para que los fanáticos de la “Academia” no logren tirar fuegos artificiales.
Con la experiencia reciente de lo ocurrido ante Estudiantes de La Plata, donde los hinchas del “Pincha” interrumpieron su descanso con pirotecnia, el club brasileño tomó medidas extremas para garantizar la tranquilidad de su plantel en Buenos Aires.
El “Mengao” se alojó nuevamente en Hudson y esta vez desplegó un operativo de seguridad de alto nivel que incluyó un fuerte refuerzo policial y controles en todos los accesos. Según informó ESPN Brasil, la zona estuvo completamente blindada: patrulleros y motos policiales rodearon de forma permanente el perímetro del hotel, que abarca unos 7.5 kilómetros dentro de un barrio privado.
De esta forma se alertó que cualquier persona que intentara lanzar fuegos artificiales podía ser detenida dentro del área de vigilancia, lo que disuadió cualquier intento de molestia por parte de los hinchas de Racing. Además, se implementó un estricto sistema de ingreso al complejo, con revisión de documentación y autorización previa del club para permitir el acceso.
El resultado fue positivo, ya que el plantel de Flamengo logró descansar sin sobresaltos y llega con energías renovadas para el encuentro de este miércoles a las 21:30 en el Cilindro de Avellaneda, donde cuenta con una ventaja de 1 a 0 obtenida en la ida.






