Juan José Retamero, dueño de Aisa Gruop logró una sentencia favorable por U$D 16 millones contra los demandados, Marcelo Bocardo, Jugos Australes S.A. y Eco Green International LLC por un millonario negocio de compra de vinos a granel y mosto de uva que terminó judicializado.
Tras lograr una sentencia favorable en los tribunales de la Tercera Cámara Civil, Comercial, Minas y Tributaria de Mendoza, Juan José Retamero, titular de Aisa Group, decidió destinar más de U$D 500 millones a obras de bien público en la Argentina.
El fallo responsabiliza a las firmas EcoGreen International LLC, a su titular Marcelo Bocardo, y a Jugos Australes S.A. por el perjuicio ocasionado, que consistió en un incumplimiento contractual, al no entregar el producto acordado, mosto concentrado, a pesar de haber recibido el pago correspondiente de parte de la firma controlada por Retamero, Iberte.
La sentencia obliga a los demandados a pagar más de U$S16.000.000 a Iberte. Para el empresario español Juan José Retamero, dueño, además, de la pesquera chubutense, Cabo Vírgenes y de la mina de oro y plata Gualcamayo, en Jáchal, provincia de San Juan “…el fallo envía una señal clara sobre la seguridad jurídica con la que cuentan los inversores en el país, al ratificar que los compromisos contractuales deben cumplirse y que el incumplimiento conlleva sanciones efectivas”.
La guerra del vino y el frente judicial con FECOVITA
La sentencia pone en alerta a los ejecutivos de Fecovita, por la similitud de las causas y los antecedentes que se consolidan con esta resolución.
Retamero es un diletante del buen Malbec, y a través de empresas subsidiarias y con socios locales, ingresó en el complicado negocio de compra de vinos a granes y mosto de uva con la cooperativa mendocina Fecovita.
Fecovita es una de las productoras de vino más grande del mundo, pero el negocio con el empresario español terminó mal y judicializado en los tribunales mendocinos y en los nacionales con denuncias y acusaciones cruzadas. El reciente fallo del 27 de octubre puede servir como antecedente a una futura resolución judicial que promete ser millonaria.
Fecovita e Iberte se unieron años atrás para crear Evisa, una compañía pensada para exportar vino y mosto en forma conjunta. Fecovita aportaba la producción vitivinícola e Iberte la comercialización en el mercado internacional.
Una sociedad estratégica que le permitía a Fecovita continuar ganando mercado en el exterior y a Iberte consolidarse como uno de los grandes exportadores mundiales de mosto.
Pero, en 2023, las empresas pusieron fin a la relación societaria y Fecovita, que agrupa a más de 5.000 productores del viñedo argentino, denunció que Iberte no había cumplido con los volúmenes y precios acordados contractualmente e Iberte asegura que Fecovita recibió U$D 32 millones y jamás entregó la mercadería pagada.
En el reciente fallo ganado por Iberte, de la Retamero es su apoderado legal, se ratificó el laudo arbitral que finalizó el litigio entre Iberte y EcoGreen International LLC, empresa de Marcelo Bocardo y puede servir de antecedente a futuras sentencias judiciales.
En el escrito judicial se establece que los codemandados -EcoGreen, Jugos Australes S.A. y Bocardo- deben responder solidariamente ante Iberte por la suma de U$S 12.195.750, más intereses desde la mora, suma que actualmente supera los U$S16.000.000.
De hecho, la imposición de la garantía prendaria sobre las acciones de Bocardo refuerza la dimensión de la responsabilidad personal, y no sólo empresarial, en el incumplimiento.
Finalmente, el tribunal coincidió con el planteo de Iberte al considerar que la falta de cumplimiento en la entrega de productos cuyo pago se había acreditado, generó el daño que ahora deberá ser indemnizado.
“Más allá de ratificar el daño ocasionado por Marcelo Bocardo y sus implicancias penales, con esta sentencia, la Justicia mendocina envía un mensaje claro: cuando se pacta una obligación, su incumplimiento sistemático configura más que una mera mora; la responsabilidad puede alcanzar al deudor principal, a los garantes y a los que se benefician de la articulación societaria que rodea el contrato. En este caso, Bocardo y sus sociedades quedan señalados como responsables del perjuicio ocasionado a Iberte, y deberán pagar una suma que, con intereses, calculamos en más de US $ 16.000.000”, afirmó Carlos Aguinaga, abogado de Iberte.
Una donación que promete ser histórica
Ahora bien, ¿cómo se pueden donar U$D 500 millones en 30 años si el monto del juicio fue por cerca de U$D 16 millones? Retamero explicó a Noticias Argentinas que “…el 100% de los fondos que puedan ser recuperados de diversas causas judiciales en trámite por recupero de sumas pagadas sin que se haya entregado el producto, serán invertidos en uno o más parques fotovoltaicos que el grupo tiene en desarrollo. El rendimiento que produzca esa inversión será donado en Argentina a obras de bien público y de desarrollo social”.
O sea, el 100% del rendimiento anual de esa inversión se destinarán a obras de bien público en Argentina, canalizadas a través de la fundación creada por el grupo. De esta manera, se espera llegar a una inversión en obra social cercana a los U$S 500 millones en 30 años, en lo que sería una de las mayores donaciones de este tipo en la historia de la Argentina.






