Francesca e Isabelle Icardi tienen 8 y 10 años respectivamente y la escena que debieron atravesar ayer para revincularse con su padre, Mauro Icardi, duró más de once horas y superó a los conflictos anteriores en donde Wanda Nara también tuvo una crisis de nervios en el proceso, por tanto, el psicólogo Jorge prado consideró que las menores “podrían sentirse objeto de discusión de sus padres”.
Prado es especialista en clínica con niños y adolescentes y se desempeña en el ámbito jurídico como perito de parte y procesos de revinculación en causas relacionadas a Infancias.
En diálogo con la Agencia Noticias Argentinas, el especialista destacó que “cada proceso que atraviesan los sujetos y principalmente los niños y adolescentes que tienen la psiquis en proceso de desarrollo, es singular. Cada proceso es único y se relaciona con las redes de apoyo y el acompañamiento de su seres cercanos entre otros factores”.
Al ser niñas que están expuestas desde muy temprana edad y con una familia de vida privada mediatizada, debieron atravesar una situación que las llevó de “ser partes a ser protagonistas de la disputa”, señaló el especialista al tiempo que indicó que podrían “sentir que terminan por ser el objeto de discusión de los padres”.
En esta línea, añadió que se pueden “poner en juego fantasías ligadas a la pérdida de amor de sus padres, de exclusión, quedar afuera por ser motivo de la disputa y ahí está lo complejo. Esto puede impactar subjetivamente porque quedan muy expuestas en una edad en donde el cuidado de la integridad debe ser esencial”.
NA – ¿Cómo se trabaja la revinculación en un caso donde no se ven con el padre desde hace más de 100 días?
JP – Es un proceso muy particular. Se trabaja con los padres y se trata de escuchar el lugar que ocupan los hijos dentro de la conflictiva de pareja. La idea es que se pueda detectar la forma en que se pone el deseo de acercamiento con los niños, si está relacionado con taponar el conflicto o hacerlos parte como un modo de manipular a la otra parte. Se trata de pesquisar que el deseo sea genuino en términos de reparar y consolidar la relación.
“Desde el lado de los niños es fundamental atender a su interés superior y entender qué lugar ocupa, escuchar qué se pone en juego con él. Los niños se ven en medio de una situación que no eligieron ser parte y ahí hay que resguardarlos”, remarcó el licenciado.
En enero de éste mismo año, trascendió un audio en donde el delantero del Galatasaray rechazó sin gracia asistir al cumpleaños de Francesca cuando la niña lo invitó. Más tarde, en la comunicación, el deportista apuntó: “Si vos querés que yo te vaya a buscar con la policía, como tu mamá mandó a la policía a casa para sacar a Silvia (la niñera que Wanda denunció), como mandó a la policía a casa para sacarme a mí, de mi propia casa (…)”.
La situación no es nueva. No obstante, el psicólogo sostuvo: “Es muy importante evitar preguntas que lleven a los chicos a tomar decisiones que los expongan desde a quién prefieren o quién piensa que los quiere más o hacen cosas por ellos. No hacerlos cargo de lo que implica una decisión de adultos. Al niño hay que asegurarle que van a seguir siendo una familia y que el amor de los padres hacia ellos, no debería tener relación con la decisión que hayan tomado como pareja”.
NA – Meses atrás, luego de una lamentable escena en el ascensor del Chateau, circularon varios videos de Nara mientras lloraba o bien del poco vínculo de las nenas con Icardi ¿Cómo puede afectar ésto en su desarrollo?
JP – De alguna manera las niñas son tomadas como tapón para esta angustia. Algo de poder marcar la simetría del adulto con el niño, del adulto contenedor, a un adulto que pareciera, por momentos, necesitar ser contenido por estos niños. De que el otro los ponga en el lugar de tener que emparchar su angustia.
JP – Esto va a tener relación con la habilidad emocional y respecto a la confianza de los niños hacia el mundo adulto. Hay un mecanismo psíquico inconsciente que es donde los niños ubican al adulto en un lugar idealizado, omnipresente y omnipotente, particularmente a los padres. Que se muestren con tanta debilidad puede influir directamente en la propia imagen que ellos construyen de sí mismos, porque los adultos son su referente. Se puede relacionar con inseguridad o pérdida de confianza de un otro referente como figura de cuidado.
NA – A la hora de retomar la relación, la justicia y otros factores influyentes señalaron que el futbolista debe estar sólo, sin la presencia de otras personas ¿Qué tan importante es este factor?
JP – Es muy importante que en este proceso de revinculación que debe ser construido paulatina y gradualmente, puede ir generandosé un espacio de cercanía y está muy vinculado con la intimidad. A los niños se les pone en juego mucha ansiedad al momento de este encuentro.
“Es destacable que en este momento de reencontrarse más cercanamente, no aparezcan otros adultos, que de alguna manera pueden aumentar la ansiedad de los niños que están rearmando algo del lazo y tendrían que atender a otros actores en la escena. Podría llegar a ser contraproducente porque va a producir montos de angustia y de ansiedad. El objetivo es ir construyendo pasos de encuentro, rearmando el lazo, rearmando el vínculo de esta manera cercana y más personal”.
“En este contexto donde, por su naturaleza le produce ansiedad a los niños, no incluya particularmente otros adultos. Los niños saben que -aquellas personas- son parte de la conflictiva entre sus padres. Entonces esto inconscientemente puede hacer que los niños sientan la necesidad de tomar partido por alguno de los dos. Y es ahí otra vez cuando los niños son ubicados como objeto de disputa”, añadió Prado.
NA – La inminente partida de Icardi a Turquía para retomar los partidos del Galatasaray se acerca cada vez más ¿Cómo se logrará una comunicación efectiva entre él y sus hijas?
JP – Lo importante es pensar, más que en cuestión de tiempo y distancia, en la calidad del tiempo compartido ya sea en una videollamada, en una llamada telefónica, etc. Se trata de qué calidad tiene el tiempo en este encuentro. Se pone en juego si es una comunicación significativa, si es una comunicación que esté atravesada por lo afectivo, por un intento de cercanía e interés.
JP – Es algo que a los padres, a veces, les cuesta dimensionar por ahí en los tiempos que corren. Es muy importante que el tiempo, simbólicamente hablando, que se le pueda dar, el niño se sienta alojado y escuchado.
Lic. Jorge Prado – Docente de “Salud Pública y Salud Mental” • Facultad de Psicología (UBA). – M.N. 55592 | M.P. 84960
