Barcelona decidió quitarle la cinta de capitán al arquero Marc-André ter Stegen tras su negativa a firmar el certificado médico que permitiría al club inscribir nuevos refuerzos bajo el reglamento del Fair Play financiero.
La medida, tomada por la directiva encabezada por Joan Laporta, se da en el marco de un expediente disciplinario abierto contra el arquero alemán.
La relación entre Ter Stegen y la institución atraviesa su momento más tenso desde su llegada en 2014, pero este conflicto se desató luego de que el jugador se sometiera a una operación lumbar sin notificación oficial al club y comunicara públicamente un tiempo estimado de recuperación de tres meses.
Según el reglamento de LaLiga, solo una baja médica superior a cuatro meses permite liberar parte de la ficha salarial para habilitar incorporaciones y la negativa del arquero a firmar el informe médico impidió al club registrar a Joan García, Marcus Rashford y Roony Bardghji.
En un comunicado oficial, el Barcelona expresó: “A raíz del expediente disciplinario abierto al jugador Marc-André ter Stegen, y mientras no se resuelva definitivamente este procedimiento, el Club, de manera consensuada con la dirección deportiva y el staff técnico, ha decidido retirarle temporalmente la capitanía del primer equipo de fútbol”. En consecuencia, el uruguayo Ronald Araújo asumirá el rol de primer capitán.
La decisión se enmarca en una estrategia deportiva liderada por Hansi Flick, quien no contempla a Ter Stegen en sus planes. Con la llegada de García como titular y Szczęsny como suplente, el club buscaba negociar la salida del alemán, quien expresó su intención de permanecer: “Barcelona es uno de los clubes más grandes del mundo y que haya competencia es algo normal. Siempre quiero entregarme y estar en el campo”.
La Asociación de Futbolistas Españoles manifestó su respaldo al jugador, mientras el conflicto continúa sin resolución. La situación expone las tensiones internas del club y plantea interrogantes sobre el futuro inmediato del arquero, cuyo contrato vigente hasta 2028 le otorga control sobre su continuidad.