Una empresa multinacional denunció en noviembre del año pasado operaciones de contrabando y tras varios allanamientos en Capital Federal y diversos partidos de la provincia de Buenos Aires se secuestró tecnología valuada en más de $615 millones.
Personal de la Prefectura Naval Argentina realizó cinco allanamientos en domicilios del barrio porteño de Monserrat, Quilmes, Tigre y San Miguel, los cuales fueron ordenados por el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N°6, a cargo de Marcelo Ignacio Aguinsky, en una investigación que comenzó hace casi un año.
“La acción tuvo como objetivo el secuestro de documentación y dispositivos electrónicos que pudieran encontrarse, vinculados a posibles infracciones al Código Aduanero”, detallaron fuentes del caso a la agencia Noticias Argentinas.
Como resultado de los operativos, se incautaron 419 teléfonos celulares, 480 vapers, 170 rastreadores, 217 relojes digitales y 795 televisores box.
Además, se secuestraron drones, teléfonos, consolas de videojuegos, proyectores, notebooks, máquinas de contar billetes, accesorios tecnológicos y dispositivos de almacenamiento.
En total, el material secuestrado fue valuado en $615 millones, a lo que se suman otros $13 millones y más de 6.000 dólares en efectivo.
En los procedimientos trabajaron en conjunto efectivos de los Departamentos Investigaciones de Delitos Económicos, del Narcotráfico y Trata de Personas de la Prefectura, junto a personal de la Dirección General de Aduanas.
La denuncia había sido radicada por la empresa Samsung en noviembre de 2024 ante la aparición de la venta de diversos artículos en páginas webs, los cuales estarían relacionadas con el delito de contrabando.