Home / Nacionales / Adiós a las ollas quemadas: el truco de la papa y la sal para dejarlas como nuevas sin esfuerzo

Adiós a las ollas quemadas: el truco de la papa y la sal para dejarlas como nuevas sin esfuerzo

¿Se te quemó la olla y el fondo parece irrecuperable? No te desesperes ni pienses en tirarla a la basura. Un sencillo y económico truco casero se ha viralizado, prometiendo devolverle a tus ollas quemadas su brillo original utilizando solo una papa y sal gruesa. Olvídate de raspar por horas o usar productos químicos agresivos; esta solución se presenta como una alternativa casi “mágica” para uno de los problemas más comunes y odiados de la cocina.

La limpieza de ollas quemadas es una tarea que a menudo genera frustración. Sin embargo, este método promete una solución fácil y sin esfuerzo. Según supo Noticias Argentinas, la combinación de ingredientes tan cotidianos como la papa y la sal ha despertado la curiosidad de muchos usuarios en redes sociales, quienes buscan alternativas prácticas y accesibles para mantener sus utensilios de cocina impecables.

EL TRUCO INFALIBLE: PAPA Y SAL AL RESCATE

Este innovador método se suma a la lista de trucos caseros que prometen resultados sorprendentes con elementos inesperados. Su efectividad radica en la acción abrasiva de la sal junto con las propiedades de la papa, que actúan sobre las manchas y residuos quemados sin dañar la superficie de la olla.

¿Cómo funciona?

* Simplemente cortá una papa por la mitad.
* Espolvoreá una generosa cantidad de sal gruesa sobre la parte quemada de la olla.
* Usá la papa como si fuera una esponja, frotando la sal sobre la superficie quemada. La papa ayudará a que la sal se adhiera y actúe de manera más eficiente, mientras su propia humedad colabora en el proceso de limpieza.
* Frotá con movimientos circulares hasta que las manchas comiencen a desprenderse.
* Enjuagá la olla con agua tibia y jabón.

Este truco no solo es efectivo para eliminar los restos de comida quemada, sino que también ayuda a restaurar el brillo de la olla, dejándola “como nueva”. Su popularidad radica en que resuelve un problema universal con ingredientes que todos tienen en casa, evitando el uso de productos especializados y el tedioso raspado. Es una muestra más de cómo las soluciones simples y económicas pueden ser las más eficientes en el hogar.