El tenista Alexander Bublik continúa atravesando un momento de ensueño en el circuito y se convirtió en un especialista de los torneos ATP 250. El kazajo, que ya fue finalista en Gstaad y Kitzbühel, volvió a alcanzar el partido decisivo en el Lynk & Co Hangzhou Open al derrotar al local Yibing Wu por 6-3 y 6-3 en apenas 61 minutos de juego.
De esta manera, se une a Carlos Alcaraz, Jannik Sinner y Alexander Zverev como los únicos jugadores que en 2025 llegaron a una final en todas las superficies.
El tercer preclasificado demostró su solidez en toda la semana sobre la pista dura china, donde solo Aleksandar Vukic logró ponerlo en aprietos en su estreno, en un duelo de más de dos horas que se definió en tres mangas.
Luego, Bublik despachó con autoridad a Dalibor Svrcina en cuartos y a Wu en semifinales, aprovechando el cansancio del tenista local para imponer su juego agresivo y un servicio casi intratable.
El kazajo, que no pierde en un torneo ATP 250 desde la primera ronda de Múnich frente a Zizou Bergs, mantiene un impecable récord de 11-0 en esta categoría.
Además, su balance global desde Roland Garros es de 23-4, lo que confirma el gran estado de forma que atraviesa. Durante esta racha, alcanzó por primera vez los cuartos de final de un Grand Slam en París, ganó el ATP 500 de Halle y se coronó en Gstaad y Kitzbühel.
En la final lo espera Valentin Royer, la gran revelación de la semana en Hangzhou. El francés, número 88 del PIF ATP Rankings, llegó desde la qualy y encadenó seis victorias consecutivas, eliminando a tres cabezas de serie, incluido el máximo favorito Andrey Rublev.
Bublik, de ganar este martes alcanzará el puesto 16 del mundo, su mejor ranking histórico.