El rugbier argentino-estadounidense Benjamín Bonasso atraviesa un momento clave en su carrera. Tras el cierre de la temporada con los Miami Sharks y la reestructuración de la Major League Rugby, el forward confesó que vive con ansiedad el futuro inmediato: “Estamos a la espera de noticias. Se cayeron varios equipos y la liga está en transición. Sé que mi etapa en Miami terminó y ahora espero definir si sigo en Estados Unidos o si aparece algo en Europa”.
Con pasado en Newman y experiencia en Rugby New York, Bonasso valoró las diferencias entre el rugby argentino y el estadounidense. “La gran diferencia está en la infraestructura y el nivel de detalle en la preparación. Acá entrenás todos los días, hay análisis de rivales y mucho seguimiento. Eso lo hace muy profesional, aunque no todos los clubes tienen el mismo nivel. Algunos todavía están en formación, con jugadores que llegan desde el college y recién empiezan”, explicó.
El jugador, que ya suma varios caps con la selección de Estados Unidos, no esquivó el análisis sobre la actualidad de los “Eagles”: “En 2019 el equipo estaba en crecimiento, pero después hubo un retroceso e incluso no clasificamos al Mundial (Australia 2027). Hoy se está armando una buena estructura en juveniles y creo que en el futuro Estados Unidos puede volver a ser una potencia. El gran objetivo es 2031, dónde quiero llegar con mi mejor forma”.
Más allá de lo deportivo, Bonasso también destacó la importancia del aspecto mental en la vida de un profesional que debe mudarse constantemente: “Es una vida complicada. Hay que tomar decisiones rápidas, mudarse de estado o de país. Miami me marcó, encontré un equilibrio con mi mujer y con amigos, pero ahora toca ver hacia dónde seguimos. El apoyo de la familia es fundamental, porque el sacrificio mental es muy grande”.
En cuanto a su estilo de juego, el tercera línea reveló que su fuerte pasa por el ataque y la elusividad, aunque busca seguir puliendo los detalles en el contacto y la defensa.
“Hace poco me operé de una hernia que me complicaba la aceleración, y espero volver rápido a mi mejor nivel. Con el tiempo vas aprendiendo qué es lo mejor para vos en nutrición, entrenamiento y recuperación. El yoga, por ejemplo, lo sumamos este año y me ayudó mucho”, contó Bonasso.
Finalmente, el jugador también se refirió a Los Pumas, equipo al que sigue con atención por sus raíces argentinas: “Tuve la suerte de compartir en juveniles con muchos de los que hoy están en la selección. Es una locura verlos en este nivel, el sistema de juego está bárbaro y ojalá les vaya de la mejor manera. Siempre es lindo verlos competir”.
Con la vista puesta en el Mundial 2031, Bonasso combina incertidumbre y ambición. Entre cambios de franquicia, restructuraciones en la MLR y la exigencia de la vida profesional, el argentino-estadounidense reafirma su compromiso: “Hoy mi objetivo está 100% puesto en llegar de la mejor forma al Mundial. Todo lo que hago es pensando en eso”.