Se la conoce como “el hotel más exclusivo del mundo”, y no es para menos. La Blair House, ubicada estratégicamente sobre la Avenida Pennsylvania, justo enfrente de la Casa Blanca, es la residencia oficial para los invitados del presidente de los Estados Unidos, y desde anoche, es el hogar temporal del presidente Javier Milei.
El mandatario argentino fue invitado personalmente por Donald Trump a alojarse en esta histórica mansión, un gesto de deferencia que no todos los líderes que visitan Washington reciben. Milei se suma así al selecto club de presidentes argentinos que han pernoctado en sus lujosas habitaciones: Carlos Menem en 1999, Fernando De la Rúa en 2000 y Mauricio Macri en 2017.
UNA MANSIÓN CARGADA DE HISTORIA Y LUJO
Lo que originalmente eran cuatro casas separadas construidas en 1824, hoy conforman un imponente complejo de 120 habitaciones y 6.000 metros cuadrados. La Blair House cuenta con 14 dormitorios para invitados, bibliotecas, salones con paredes tapizadas en seda, arañas de finos caireles y tesoros de valor incalculable.
Entre sus reliquias se destacan jarrones de porcelana china, murales pintados a mano del siglo XVIII y hasta un escritorio utilizado por Abraham Lincoln, donde los huéspedes actuales, incluido Milei, tienen permitido trabajar.
Por sus pasillos han transitado algunas de las figuras más importantes de la historia mundial, como la Reina Isabel, Winston Churchill, Charles De Gaulle, Nelson Mandela y Margaret Thatcher. De hecho, durante la reconstrucción de la Casa Blanca en la era Truman, el entonces presidente y su familia vivieron allí durante casi cuatro años.
Como es tradición, la bandera argentina ondea en el frente de la residencia como gesto de bienvenida al invitado internacional.
UNA ESTADÍA FUGAZ
A pesar del lujo, la visita de Milei será breve. Llegó pasada la medianoche del lunes y su agenda de este martes está centrada en la crucial reunión y almuerzo de trabajo con Donald Trump en la Casa Blanca.
Antes de emprender su regreso a Buenos Aires por la noche, el presidente dejará su firma en el histórico libro de visitas de la mansión, sumando su nombre a la larga lista de líderes mundiales que han pasado por “el hotel más exclusivo del mundo”.