La China Suárez volvió recargada a la Argentina, protagonizando numerosos cruces desde su llegada, entre ellas un enfrentamiento contra la periodista Laura Ubfal por divulgar información sobre ella en redes sociales.
El martes por la noche, cuando estalló el escándalo por la “cancelación” de la entrevista de la actriz en Luzu, Ubfal comunicó la noticia y la China le contestó tildándola de ser “opereta” y recordándole un favor que le pidió relacionado con su hija.
Esa noche, la periodista optó por el silencio para poder referirse al tema el miércoles por la noche en LAM.
Con el aval de Ángel de Brito, la panelista se defendió de las acusaciones de estar “operada” por Wanda y de ser una “resentida” con la actriz: “Primero que no me opera nadie, ni soy resentida, no tengo por qué serlo. Jamás hablé mal de ella, puede buscar todo lo que sea. Lo único que hago es dar información, y la que di la repitió todo el mundo. La tenían Yanina y otros colegas”.
Sobre “pedir una nota con ella”, explicó que lo único que intento hacer fue buscar información sobre con quién se iba a efectuar la polémica entrevista: “Nunca pedí una nota con ella, jamás. Lo que hice fue preguntar si iba a dar entrevistas individuales, porque se rumoreaba mucho. Hablé con la gente de Disney y me invitaron a la conferencia de prensa, nada más”.
Además, volvió a apuntar con las exigencias que ella dice “no haber pedido”: “Las condiciones las maneja su mánager, no Disney. Y si pide que no le pregunten determinadas cosas, está en su derecho, pero tampoco se puede culpar a los medios por contar lo que pasa”.
Por último, se refirió al “favor” que le pidió a la China: “De mi hija no voy a hablar, no tiene nada que ver. Trabaja desde los 16 años, tiene bajo perfil y jamás necesitó de nadie”,
