Buenos Aires, 21 noviembre (Xinhua) — La cumbre del G20 de Sudáfrica parece una fuente inagotable de conflictos y una de las últimas noticias indica que el presidente de aquel país, Cyril Ramaphosa, se rehusó a entregar la presidencia del Grupo a un diplomático estadounidense de bajo rango.
Así lo afirmó la oficina del Presidente, en medio de las crecientes tensiones diplomáticas entre Pretoria y Washington, según revela la agencia de noticias Xinhua, a cuyo servicio está abonada Noticias Argentinas.
“El Presidente no hará la entrega a un encargado de negocios”, escribió el vocero presidencial Vincent Magwenya en la red social X.
KAROLINE LEAVITT TUVO QUE VER
La disputa surgió después de que la secretaria de prensa de la Casa Blanca estadounidense, Karoline Leavitt (en la imagen), criticara el jueves a Ramaphosa, a quien acusó de “hablar de más” sobre el boicot estadounidense a la cumbre del G20. Leavitt, la joven de la Casa Blanca pródiga en conflictos, confirmó que una delegación estadounidense asistirá a la ceremonia de entrega al final de la cumbre, pero señaló que Washington no participará en las discusiones del G20.
Se espera que Marc D. Dillard, encargado de negocios en la embajada estadounidense en Pretoria, encabece la delegación estadounidense en la próxima Cumbre de Líderes del G20.
En la práctica diplomática, un encargado de negocios es el jefe de misión de más bajo rango, que generalmente es nombrado sólo cuando un país no tiene un embajador en funciones. A diferencia de un embajador o un ministro, un encargado de negocios no presenta credenciales al jefe de Estado anfitrión y habitualmente es considerado un representante temporal o de bajo rango.
“NOTICIAS FALSAS”
Ramaphosa afirmó que Estados Unidos había indicado que podría reconsiderar su participación en la próxima cumbre del Grupo de los 20 (G20) en Johannesburgo, pero la Casa Blanca desestimó la información, calificándola de “noticias falsas”. Ramaphosa pronunció estas declaraciones en una rueda de prensa conjunta con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, António Costa.
“Hemos recibido una notificación de Estados Unidos, sobre la cual aún estamos dialogando con ellos, acerca de un cambio de opinión respecto a participar de una u otra forma en la cumbre”, declaró. Y añadió que esta información se produjo pocos días antes de la reunión y que era necesario un mayor diálogo “para evaluar su viabilidad y sus implicaciones finales”.
A PROPÓSITO DE LEAVITT
Karoline Leavitt ya polemizó hasta con el ayatollah Ali Jamenei, Líder Supremo de Irán, después de haber terciado hasta en los conflictos del presidente, Donald Trump, con la agencia de noticias The Associated Press, entre otros medios de comunicación.
TAMBIÉN HABLÓ LA SUBSECRETARIA DE PRENSA
Al republicar el informe de la Corporación Sudafricana de Radiodifusión sobre la intención de Estados Unidos de “reincorporarse a las conversaciones de la cumbre”, la subsecretaria de prensa de la Casa Blanca, Anna Kelly, lo desestimó como “noticias falsas” en la red social X. Además, Leavitt declaró a la prensa el jueves que Washington no participará en las conversaciones del G20, y que un enviado asistirá únicamente a la ceremonia de traspaso de la presidencia al término de la cumbre. E informó que el encargado de negocios de Estados Unidos en Pretoria, Marc D. Dillard, asistirá a la ceremonia de traspaso como mera formalidad.
En respuesta, Vincent Magwenya, portavoz de Ramaphosa, escribió en X: “El Presidente no entregará el cargo a un encargado de negocios”.
A principios de noviembre, el presidente estadounidense Donald Trump anunció que ningún funcionario estadounidense asistiría a la primera cumbre del G20 celebrada en suelo africano, alegando supuestos malos tratos a los afrikáneres y “genocidio”, una acusación que Sudáfrica rechazó enérgicamente. En la Argentina, la gestión de Javier Milei siguió a pie juntillas los designios estadounidenses. #AgenciaNA.






